Esto es lo que enseñan los cuentos tradicionales y algunos de nueva creación. Pero además cuando en la actividad interpretan esos personajes y cada uno/a elije el suyo, la experiencia es recogida por su psique/mente con toda su plenitud, es decir van aprendiendo todas esas actitudes que hay que aprender para vivir en el mundo que les rodea.
Existe una tendencia a eliminar de la vida de los niños y las niñas este tipo de cuentos, porque "no proporcionan imágenes reales de vida tal como es y que por lo tanto, son perjudiciales" pero su comprensión sobre cómo funciona el mundo es diferente a la nuestra, con decirles las cosas no es suficiente, necesitan experimentarlas a través del juego, y cuando hablo de experimentar estoy diciendo implicar todos los sentidos, no solo la mente. Aquí tengo que decir que las historias dulcificadas por la televisión y el cine no tienen los mensajes existenciales de los auténticos cuentos recogidos de la tradición popular por los hermanos Grimm o Charles Perrault. Sus protagonistas tienen características claras, los buenos son buenos y los malos malos, no hay ambigüedad ....
- "La vida real no es así" - dicen algunas personas
La actividad de Cuenta Cuentos les permite experimentar con todo esto y va contribuyendo a que su inteligencia emocional crezca, y con ella vayan aprendiendo a socializarse, a responder a las situaciones de forma más adecuada, a frustrarse y luchar por conseguir lo que quiere como sus personajes de los cuentos e historias favoritos.
¿Para qué?, porque son más felices y obtienen mejores resultados las personas que son capaces de reconocer qué hacer en situaciones diferentes, utilizar su conocimiento emocional allí donde es necesario, porque no nos engañemos, el mundo cree que es la razón la que manda, pero si lo pensáis un poco ...... ¿qué creéis vosotros y vosotras?, revisar vuestra propia experiencia de vida y ya me decís. Ahora te toca a ti hablar.